El exdiputado Íñigo Errejón ha señalado que la denuncia presentada por la actriz Elisa Mouliaá en su contra es «falsa» y ha solicitado al Juzgado reabrir el caso para poder dar su declaración lo antes posible. Errejón expresó su malestar por el «limbo procesal» en el que, según él, se encuentra debido a la suspensión del procedimiento, la cual fue determinada después de que la abogada de Mouliaá solicitara una baja por embarazo, sin delegar su representación a otro abogado.
El magistrado Adolfo Carretero, quien supervisa el caso desde el Juzgado Número 47 de Madrid, determinó archivar temporalmente la causa hasta que la abogada de la demandante esté en condiciones de retomar sus funciones. Carretero explicó que la decisión se debe a que la abogada se negó a designar a un sustituto, por lo que el proceso no podría avanzar sin su intervención directa. Errejón ha argumentado que este aplazamiento es una «estratagema» que, en su opinión, busca dilatar el procedimiento, afectando negativamente su imagen y su derecho a la presunción de inocencia.
En su recurso, Errejón expresó que es «urgente» que se le permita presentar su declaración ante el tribunal para exponer su versión de los hechos y refutar las acusaciones de Mouliaá. Su defensa calificó de «inaceptable» el hecho de que el exdiputado tenga que esperar al menos cuatro meses hasta que se reanude el procedimiento. Errejón también ha criticado lo que considera «mala fe» en la actuación de la abogada de la denunciante, señalando que el retraso innecesario del proceso podría prolongarse hasta abril de 2025, generando un perjuicio considerable para su reputación pública.
La defensa de Errejón sostiene que el aplazamiento actual es una situación «inédita y sin precedentes», además de «jurídica y humanamente inaceptable», y pide que la actriz Mouliaá designe un nuevo abogado en un plazo de 24 horas para que el proceso judicial pueda reanudarse sin más dilaciones.
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